Feliz día hermanas, que nuestra bendita madre Clara nos ayude y enseñe a descubrir en el día a día, la grandeza de la vocación a la que hemos sido llamadas y "con paso apresurado, sin que se nos pegue el polvo del camino", vallamos gozosas al encuentro del Amado, siendo también lumbreras para nuestro mundo.
Recibid un abrazo fraterno de Sor Eugenia y Sor Isabel Mª