Pestaña

martes, 4 de octubre de 2022

Carta del Ministro Povincial en la solemnidad de San Francisco

Fray Joaquín Zurera Ribó, OFM
Ministro provincial

«A quien tanto ha soportado por nosotros, tantos bienes nos ha traído y nos ha de traer en el futuro, toda criatura del cielo, de la tierra, del mar y de los abismos, rinda alabanza, gloria, honor y bendición; porque Él es nuestra fuerza y fortaleza, el solo Bueno, el solo Altísimo, el solo Omnipotente, admirable, glorioso, y el solo Santo, laudable y bendito por los infinitos siglos de los siglos. Amén» (2CtaF 61-62)

A los hermanos de la Provincia, a las hermanas contemplativas, a los hermanos y hermanas de la OFS, de los movimientos juveniles franciscanos, de las hermandades y cofradías asociadas a nuestra Provincia

lunes, 3 de octubre de 2022

Carta del Ministro y Definitorio General a toda la Orden en la solemnidad de San Francisco

«…A
todos mis hermanos, predicadores, orantes, trabajadores
tanto a los clérigos como a los laicos»   
San Francisco, 1R XVII, 5

 

Estimados Hermanos y Hermanas,
¡El Señor os dé la paz!

Las palabras de San Francisco que hemos elegido como título de esta carta ofrecen una síntesis precisa de la identidad de la Orden tal cuál como Francisco la quiso: una comunidad compuesta por hombres que en su vida cotidiana realizan diversas actividades, al mismo tiempo que cultivan profundamente su pertenencia a la gran familia de la Iglesia de Jesús.

sábado, 1 de octubre de 2022

Intercambio de oraciones mes de octubre

POR LOS HERMANOS MENORES

DE LA PROVINCIA DE LA INMACULADA CONCEPCIÓN

 Ruega por nosotras San Francisco de Asís.

 

“El amante de toda humildad se trasladó de Gubbio a los leprosos, y convivió con ellos, prestándoles con suma diligencia sus servicios por Dios. Les lavaba los pies, vendaba sus heridas, extraía el pus de las úlceras y limpiaba la materia hedionda, y hasta besaba con admirable devoción las llagas ulcerosas el que había de ser después el médico evangélico. Por lo cual consiguió del Señor el extraordinario poder de curar prodigiosamente las enfermedades espirituales y corporales”. LM 2,6