POR LAS HERMANAS DIFUNTAS DE LA FEDERACIÓN
Ruega por nosotras Santa Clara de Asís.
“ Las Hermanas que han consumado el curso de su peregrinación en la vida terrena deben seguir siendo consideradas miembros de la Fraternidad Federal, por lo cual todas las Comunidades deberán tenerlas presentes en su oración” EE.FF 118&1
Queridas y amadas hermanas Clarisas, que el Señor de la vida os de su paz.
Con la Solemnidad de todos los Santos iniciamos el mes de noviembre y antes de finalizar el mismos haremos memoria y recuerdo de una multitud de hermanos y hermanas de la Orden Franciscana que vivieron el carisma esparciendo santidad en toda la Iglesia, algunas han convivido con nosotras y otras las recordamos y rezamos en la Liturgia de las Horas.
La Iglesia universal en el mes de noviembre nos ofrece y nos da la oportunidad de ofrecer las indulgencias por las almas del purgatorio. Seamos agradecidas a ellas para que puedan muy pronto participar de la visión beatifica de los bienaventurados del Reino.
Recordemos con cariño a las hermanas que ya no están con nosotras y flexionemos pausadamente lo bueno que sembraron dentro de la fraternidad. Pongamos nombres y rostros. Pidámosle para que ellas nos ayuden a ser instrumento y sembradores de paz, en la fraternidad y en la Federación.
Dale Señor, el descanso eterno y brillen para ellas la luz eterna. Que todos los fieles difuntos- hermanos y hermanas Franciscanas-,por las misericordia de Dios, descansen en paz.
En nuestro cementerio pongamos durante este mes de noviembre, algunas flores naturales, con un texto fraterno que nos una a ellas.
Con nuestra lámpara encendida ante la presencia del Señor, colocamos el nombre de: “Difuntas”.
En este mes de noviembre podemos tener como referencia espiritual en nuestras relaciones fraternas la lectura meditada y reposada de la Sexta Admonición de San Francisco: “De la imitación del Señor”.
